4 CLAVES A LA HORA DE COMPARAR UNA HIPOTECA

no te compliques

Comparar una hipoteca, meterte de lleno en ver si te conviene mas una oferta que otra, parece fácil... pero no lo es. Hay que revisar decenas de parámetros para poder decidirte por la mejor opción. Incluso así, no siempre es fácil discernir entre la mejor de las opciones y la ayuda de un profesional siempre viene bien. Pero si quieres hacerlo por tu cuenta, te damos las 6 claves básicas para que puedas hacerlo.

LAS 4 CLAVES

1. Las Bonificaciones

Son un aspecto clave que puede encarecer lo que acabas pagando a incluso a corto plazo. Muchos bancos te dan un tipo de interés interesante a cambio de contratar productos con un precio muy por encima de precio de mercado (como los seguros de vida y hogar) o productos que no quieres ni necesitas (como planes de pensiones, seguros de coche, alarmas...). Aunque te ofrezcan un TIN bajo, si te 'enchufan' muchos productos vas a perder dinero. Seguro.

2. Las comisiones

Comisión de apertura, comisión de cancelación parcial, comisión de cancelación total, comisión de desistimiento, comisión de compensación de riesgo de tipo de interés, comisión de subrogación, comisión de cambio de condiciones o subrogación, comisión de reclamación de posiciones deudoras...

Abrumador, ¿verdad? Pues son comisiones normales en las hipotecas.

Ojo con ellas.

3. Que miro, ¿el TIN o el TAE?

Para poder comparar bien, necesitas el TAE. Pero la realidad es bien distinta: no vas a tener el TAE real hasta que no te hayas gastado el dinero en la tasación y hayas avanzado con la operación hasta casi el día de la firma. El TAE que te dan en las ofertas iniciales no es el TAE real. El TAE real saldrá solo en el FEIN (la oferta final).

Así que, si quieres comparar inicialmente, tendrás que fijarte en el TIN, en las bonificaciones a cumplir, en las comisiones... en todo lo que te estamos explicando aquí, vaya.

4. ¿Qué tipo de hipoteca pides?

No es lo mismo pedir una hipoteca para tu primera vivienda, para vivir allí, que pedirla para comprarte una segunda residencia o ampliarla para una reforma... y mucho menos si tu idea es hacer una hipoteca autopromotor (las más complejas sin duda).

Cada tipo de hipoteca tendrá sus propias condiciones y no podrás conseguir lo mismo si compras tu casa para vivir que para invertir.

¿Y cómo lo haces ahora?

Ya tienes las bases para poder hacer una mejor comparativa, pero ya has visto que la tarea es complicada. Hay más parámetros a tener en cuenta además de estas cuatro claves (como comisiones por mantenimiento de cuentas, tarjetas, transferencias, etc.) en las que tampoco te conviene mirar hacia otro lado, pero quizá (y sólo quizá) sean un poquito menos importantes. ¿Nuestra recomendación? Busca un buen asesor que te facilite la tarea y olvídate de complicaciones.